Este sitio Ramsar, que se encuentra en la región de Tassili n’Ajjer, en el sureste de Argelia, se amplió pasando de 6 500 hectáreas a casi 58 000 ha en 2018. El valle de Iherir es un valle elevado cuya altitud oscila entre 1 100 y 1 400 metros y que se encuentra en el centro de una meseta de piedra caliza en el Sáhara caracterizada por ríos, lagos y marismas intermitentes, manantiales de agua dulce y sistemas hidrológicos kársticos subterráneos. El aislamiento del sitio ha dado lugar a fenómenos evolutivos extraordinarios, particularmente en las especies que han podido adaptarse a la desertización de la zona, como lagartos, serpientes y cuatro especies de peces. El sitio también alberga especies de mamíferos amenazados como el arruí (Ammotragus lervia) y la gacela Dorcas (Gazella dorcas), clasificados como vulnerables. Las comunidades de tuaregs, que habitan en terrazas por encima del fondo del valle, cultivan palmeras datileras e higos así como hortalizas en zonas umbrías. Las paredes de roca de las montañas albergan ricos testimonios pictóricos de algunas de las primeros poblaciones humanas del Sáhara. Esto ha dado lugar a un turismo considerable, que está empezando a recuperarse tras haberse reducido drásticamente entre 1992 y 2000.